El pasado viernes 27 de abril me desperté de la siesta cuando
acababan de dar las cinco de la tarde y en el transistor sonaban unas agoreras
noticias que me sobresaltaron y arrebataron de la confortable placidez que
había conseguido con el sueño vespertino, la ayuda de mi sillón de lectura y la
reflexiva voz de Toni Garrido y
sus Asuntos Propios a muy bajo
volumen.
Paro galopante
El locutor informaba de que la cifra de desempleados avanzaba
hacia los seis millones y el ministro Luis de Guindos animaba al optimismo con
su pronóstico de que “España no crearía empleo hasta 2014” y solo a expensas de
una mínima bajada al 24,2% en 2013, y al 23,4% en 2014.
S&P equipara
España con Irlanda
A los datos del paro siguió la noticia de que la calificadora Standard & Poor's
había recortado el día anterior la calificación de la deuda española en dos
escalones y se nos adjudicaba una nota BBB+ que equiparaba a España con Italia o la intervenida Irlanda, dos de nuestros socios mas mortificados
por la crisis. Eran dos datos que no invitaban a disfrutar el fin de semana con puente que acababa
de empezar, pero el panorama se ensombreció aun mas con la siguiente noticia
emitida en ese infausto boletín de las cinco.
Sube el IVA en 2013
Casi me pareció percibir un matiz de disculpa en la voz del
locutor de Radio 1 (supongo que sería imaginación mía) cuando dijo que el ministro de Economía, Luis de Guindos,
había anticipado una subida del IVA para 2013 debido la
necesidad de recaudar 8.000 millones adicionales.
Pensé que estábamos ante un nuevo incumplimiento del programa
electoral de los populares y otra medida
de castigo que prometieron no aplicar y censuraron severamente cuando surgió
como una posibilidad durante el gobierno anterior. Por cierto, me llamó la
atención que el ministro Guindos cauto y utilizara para anunciar este dislate
recurso literario ("se va a producir
una modificación de la estructura de la imposición en España, con una reducción
de la imposición sobre el trabajo y un aumento sobre la imposición al
consumo") con el que eludió mencionar el
acrónimo con el que se conoce el impuesto del valor añadido.
Privatización de la
sanidad valenciana
Si la tercera había sido el IVA y en la frente, la cuarta y
última me dio de lleno donde mas me podía doler. El locutor, que ya se me
antojaba como el mensajero del ángel exterminador, anunció que el Gobierno
valenciano iba a instaurar un nuevo modelo sanitario que a todas luces
insinuaba una privatización de los hospitales y centros de salud de la Comunidad Valenciana a partir de 2013. Acto
seguido apagué la radio.
Colofón
Mientras escribo esta crónica he llegado a dos conclusiones que expondré
a modo de colofón:
1- El PP pasará a la historia como el
partido que, en un periodo mas corto de tiempo, mas promesas electorales ha incumplido y mas
medidas ha adoptado de las que prometió no aplicar nunca.
2- Tal vez fuera conveniente (en base a
mi experiencia personal) dejar de dormir la siesta hasta que pase la crisis o,
al menos, no escuchar la radio nada mas despertar de tan placentero modo de hacer la digestión.
Alberto Soler Montagud
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