A lo largo de la historia la fiesta de las fallas se ha caracterizado por una reivindicativa crítica social que en algunos momentos históricos de la dictadura franquista fue el único modo en que los valencianos podían manifestar su reprobación ante las arbitrariedades de unos gobernantes e instituciones entonces intocables. Las fallas eran una válvula de escape que cada mes de marzo, con el beneplácito de una censura que hacía la vista gorda, promovía las sonrisas de quienes interpretaban lo que los ninots insinuaban y lo que entre líneas sugerían los sencillos versos explicativos de cada efímero monumento antes de que el fuego los convirtiera en cenizas.
El meninfotismo valenciano
Si bien siempre he conseguido sintonizar, y hasta entablar una cómplice connivencia, con ese espíritu fallero (mitad humorístico, mitad denuncia) con el que muchos valencianos celebran la llegada del equinoccio de primavera, este año me ha resultado difícil asumir una característica idiosincrática (mas bien un rasgo) que se identifica y hasta define la valencianía y que, en la coyuntura socioeconómica actual, me avergüenza mas que nunca. Me refiero al “meninfotismo”, un término intraducible al castellano que podríamos definir como un “dejémoslo estar…”, “no vale la pena…”, “aguantemos y ya está…”, “total para qué…”.Lo que critican las fallas de 2012
La resignación que indefectiblemente se asocia con el meninfotisme valenciano me ha hecho reflexionar, y hasta sentirme mal, estas fallas de 2012 al comprobar como el arte y la sátira que otros años me hacían sonreír, en esta ocasión me han embargado de una incómoda indignación.
Como cada año, en las fallas se ha conjugado una crítica al caricaturizar múltiples aspectos de nuestra vida social y política. Este año, en un porcentaje muy elevado, los jocosos vituperios surgidos de la inspiración de los artistas falleros han tenido como objetivo una severa reprobación a personajes como Francisco Camps, Carlos Fabra, Rita Barberá y tantos implicados e imputados de todos conocidos por su relación (presunta o no) con las tramas de corrupción política.
También ha sido monotemático un general reproche a la crisis, las circunstancias que nos han conducido a esta deplorable situación, sus responsables y sus principales perjudicados (las clases trabajadoras) mientras las grandes fortunas acabarán siendo beneficiadas o al menos incrementando su patrimonios al poder comprar inmuebles a precio de saldo a unos desesperados vendedores asfixiados por el crac.
Las fallas se hacen eco de los recortes
Como noticia de última hora, y como consecuencia de los recortes (es admirable la capacidad de los artistas para, en muy poco tiempo, modificar el “guión” de una falla y adaptarlo a la mas palpitante actualidad), proliferan por todas las calles y esquinas de la ciudad decenas de ninots representando a un amenazante Rajoy que, tijeras en mano, conmina con dejar en la ruina a los contribuyentes en general y a los funcionarios en particular.
Antes reíamos, ahora lloramos
Otros años, críticas de esta índole, así como también otras que aun no he mencionado como las alusivas a la manipulación informativa de Canal 9, los derroches y opulencias de una administración autonómica que ha dejado en quiebra a la Comunidad Valenciana, las acusaciones de financiación irregular del partido que ostenta el poder, los casos de prevaricación y un triste y largo etcétera, me habrían hecho sonreír.
Pero hoy, en plenas fiestas falleras de 2012 y a menos de tres meses de la últimas elecciones generales, no puedo menos que considerar improcedentes las jocosas manifestaciones de las masas adocenadas que ríen con ganas las críticas a sus gobernantes mientras se deleitan con los sugestivos monumentos que engalanan la ciudad Valencia.
Por qué los censuráis si hace poco les votasteis
Ante tanta desfachatez y tantas caras risueñas que comen buñuelos y miran con admiración a uno y otro lado sin dejar de sonreír, no puedo evitar preguntarme: si tanta gracia les hace que las fallas critiquen a los políticos valencianos, si tan corruptos los consideran, si tan salvajes y censurables les parecen las medidas de los recortes ¿podría alguien explicarme porque la mayoría de los valencianos lleva tantos años votando al PP? ¿por qué se premia a la corrupción en las urnas? ¿porqué se indignan y asustan de Mariano Rajoy y sus enormes tijeras quienes hace menos de tres meses le otorgaron una mayoría absoluta para que hiciara lo que quisiera con la ayuda de los poderes fácticos que apoyan a su partido?
No diré nada mas.
Buenas fallas y buena suerte.
Alberto Soler Montagud
Es una contrariedad que yo no llego nunca a comprender, no sé como la mayoría de valencianos pueden vivir tan tranquilos con la cantidad de chorizos que los gobiernan.
ResponderEliminarLa amenaza Catalanista caló muy hondo en las conciencias "Valensianas" ¿acaso nadie se acuerda de Amparito la "reventaplenaris"?, aquella mujer, escasa estatura y bolso de skai, consiguió lo que nunca ningún político conseguirá, calar en la sociedad con un solo mensaje "som valençians mai Catalans" y obtener el respaldo de miles de ciudadanos. ¿que política ha hecho el pp en estos años? la que le dictó Amparito aunque ahora los bolsos sean de Vuiton. Algo que no se debe olvidar nunca es que, a diferencia de los Catalanes que consiguieron que sus emigrantes Andaluces y extremeños se integraran y hablaran Catalán, en Valencia esos mismo inmigrantes han coseguido que el Valenciano desaparezca por no ser una lengua Española.
ResponderEliminarA los que dicen que votan al PP porque el PSOE es peor. ¿Peor en qué sentido? Que yo sepa el PSOE no legisló para cargarse derechos laborales y aunque tiene sus casos de corrupción, son una minucia comparados con los que salpican al PP. El PSOE no construyó ningún aeropuerto sin aviones y consiguió ahorrar millones en Sanidad haciendo que los medicamentos fueran genéricos en vez de medicamentos de marca, sin plantear copago alguno. Yo, la verdad, me sentía más a gusto con un presidente a quien el presidente de la CEOE calificó como "el mal de España" que no este presidente de ahora con el que la CEOE está tan sonriente y triunfante. ¿Por qué se perdonan más los pecados de la derecha que los de la izquierda?
ResponderEliminarPara opinar sobre este tema, creo que hay que hacer un poco de historia.
ResponderEliminarEn las primeras legislaturas de la democracia Valencia era de izquierdas. El pueblo llevo al PSOE al poder municipal y autonómico con muchos votos. Que paso?
Pues que por desgracia los valencianos no encajamos en una cierta idea del Lermismo, que si país, que si la bandera, el idioma, la cultura, etc., que repito son temas mucho mas de calado, sobre todo en la Provincia de Valencia y en la ciudad y su entorno (1,400.000 habitantes).
Que si las fallas son horteras, problemas con el Valencia CF, etc.
Ósea que durante mucho tiempo como votante socialista, me he preguntado: a que juegan los del PSOE... Luego ya he visto que juegan, a la partidocracia, alejados de la realidad que no les gusta y muy cómodos con sus sueldos de por vida, como mediocres que son.
Durante mucho tiempo no se comprendía que una persona podía ser blavera y de izquierdas.
Yo lo soy. Llevo toda mi vida 55 años votando al PSOE y quemado con ellos.
Pero que no miren para otro lado. Y Lerma aun continúa. Es increíble
Pere el Roig
España es un pais al que, definitivamente, hay que dejar que se destruya solo ya que es lo único que sabe hacer. Se echa en manos del pp que les ha mentido, manipulado y prometido cosas que no va a cumplir porque lo único que le interesaba era el poder para acabar con las conquistas sociales que nos hacía ser un pais confiado y feliz. Ahora conoceremos la oscuridad, la tristeza y el castigo por haber sido infieles a las doctrinas del nacionalcotlicismo que inspira al pp ¿donde está Rouco Varela que ya no se le oye ni sale a la calle a manifestarse?. España, definitivamente, va a retroceder 40 años para que el pp sea el señorito y nosotros los siervos, se acabo la ciudadania.
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